La berenjena es un alimento esencial dentro de la Dieta Mediterránea
La berenjena no destaca por su valor energético ni nutritivo, ya que ofrece un residuo seco inferior al 8% a causa de su escaso contenido proteico, hidrocarbonado y mineral. El agua es el elemento mayoritario de su peso con un aporte calórico de 20 kilocalorías por cada 100 gramos. Los ácidos fenólicos y las antocianinas presentes en su piel, proporcionan importantes efectos antioxidantes, antivirales y hemostáticos, por lo que sirve de regulador del tránsito intestinal y ayuda a rebajar los niveles de glucosa y colesterol de la sangre.
Las berenjenas soportan mejor el calor y son sensibles al frío, por lo que su cultivo abunda en verano. No obstante, gracias a la producción en invernadero, está disponible siempre en el mercado.